Pues sí, está en España. Le acompaña un tal Sarkosy, que por lo visto es Presidente de Francia o algo así. La muchacha por donde quiera que va causa sensación. To el mundo pasa de su marido, y nada más quieren hablar con ella y escuchar su linda voz que les susurre "oh, mon petit" o cualquier otra gabachada. En fin, así de gilipollas se ha vuelto el mundo.
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